El Club Waterpolo Chiclana logra el pase a la eliminatoria de ascenso en el último partido

Que el Club Waterpolo Chiclana está abonado al sufrimiento desde sus inicios es sabido por todos, y fiel a su historia, no iba a dejar de sufrir para conseguir su objetivo en el partido hasta ahora más importante en sus casi 10 años de vida. El choque del pasado sábado, el último de la liguilla de ascenso, no fue nada distinto a lo esperado, puesto que los chiclaneros tuvieron que sufrir para lograr la victoria por diez a ocho y lograr, de esta forma, el pase para la eliminatoria de ascenso. 

Los de Fran Del Valle comenzaron muy atenazados, presa de la responsabilidad, encima con el hándicap de la falta de efectivos al ser una plantilla corta aunque muy competitiva. Tuvieron que redoblar sus esfuerzos para que no relucieran sus carencias. Con las ausencia esperadas de Charly y Barry, y la de Pedro por sanción, se afrontó el envite con tan sólo cuatro jugadores en el banquillo.  

Tan sólo Víctor Quiñones mantuvo el tipo y gracias a sus paradas mantuvo al equipo con vida. Mediados el primer cuarto llega el 0 a 1, que bien pudo haber llegado antes incluso haber aumentado hasta en cuatro ocasiones, no obstante el equipo al menos en defensa mantiene la compostura, y Víctor en su mejor cuarto de toda la temporada, demuestra que los porteros en waterpolo cuentan y mucho. En ataque cien por cien de efectividad, Fran que estuvo soberbio en todo el partido, consigue el empate de tiro directo tras una falta en el ataque siguiente al 0 a 1, siendo el único tiro que fue entre los tres palos. De ahí al final del cuarto, mucha tensión y poco juego.

En el segundo cuarto no empiezan mejor las cosas. Álvaro Caracuel demuestra porqué ha sido convocado por la selección Nacional Juvenil con un tiro milimétrico a la escuadra, el 1 a 2 campea durante todo el cuarto, con los chiclaneros incapaces de deshacerse de la defensa rival, incluso las cosas empeoran con otro gol del 9 marbellí a falta de dos minutos calcado al anterior. El equipo que hasta entonces no ha dado señales de lo que es capaz de hacer reacciona a dos minutos para el final, con una jugada personal de Juanfran en dos metros que logra zafarse de dos defensas, la jugada levanta el ánimo, reaccionando el equipo y las más de 300 personas que llenaban la cubierta, que hasta entonces permanecían atónitas y con el susto en el cuerpo. En una contra tras una muy buena defensa casi llega el empate, pero no le llega el balón al boya chiclanero en buenas condiciones, en la siguiente jugada es el Marbella quien no perdona, colocando el 2 a 4 a 24 segundos y la remontada como un espejismo. Con  esos escasos 24 segundos por delante para al menos llegar con vida al descanso es Fran quien se la juega consiguiendo el 3 a 4 y resucitando al equipo medio moribundo.

Tras el descanso Del Valle cambia la defensa y convence al equipo que vuelve a  creer en sus posibilidades.  Fran se encarga de Caracuel, los jugadores del perímetro presionan, dejando el tiro exterior al veterano Rafa Blanco, Juanfra baja ayudar a Cristian, impidiendo su juego interior. La táctica da sus frutos y el empate llega en el primer minuto obra de Juanfran de nuevo desde los dos metros. El Marbella vuelve a adelantarse pero de nuevo Juanfran replica en la jugada siguiente. Los nervios se han dejado fuera, y el partido con empate a 6 comienza de nuevo. El toma y daca es continuo, pero sin moverse el marcador, por momentos parece que el equipo se atenaza,  y es entonces cuando aparece el zurdo chiclanero Javi Salado, hasta entonces implacable en defensa pero inédito en ataque, coloca al equipo por primera vez por delante, dando la tranquilidad necesaria, y siendo conscientes que el empate también era bueno para el objetivo final.

Una vez el equipo por delante, éste juega con mucha mayor tranquilidad, la defensa sigue funcionando, y en ataque se intenta agotar la posesión. Tras exclusión temporal del veterano central marbellí, Fran pide tiempo muerto para preparar la superioridad numérica, sabedor que de materializarla el partido se iba a declinar para los chiclaneros. El uno de más es muy bien jugado y sale  a la perfección según  la estrategia marcada, siendo Fran quien lo culmina desde dentro con un palmeo. Sin embargo el rival no se amilana y replica de nuevo. El 9 a 7 lo coloca Cristian al transformar un penalti de forma magistral. El 9 a 8 llega tras exclusión de Javi, pero el equipo no se arruga, se dedica  a defender ese gol arriba, peleando como jabatos, y sin dejar hueco a los tiros que los hubo pero con escaso peligro, las ansias de victoria chiclanera  se imponen a las marbellíes, que se quedan sin efecto tras el 10 a 8 definitivo otra vez conseguido por Fran, en superioridad numérica.